7 razones para pensarlo dos veces antes de irse a vivir con amigos
Si has tenido el chance de vivir solo, obligatoriamente te ha tocado tener un compañero imposible, y si no lo has hecho, aquí hay algunas razones para que no lo hagas.
Quienes han tenido la oportunidad de irse de sus casas e independizarse saben que no es nada fácil hacerse cargo de todos los gastos que implica vivir solo.
Los servicios, el arriendo, la comida, los arreglos son solo una parte de lo que incluye mantener una casa. Por esta razón muchas veces nos toca acudir a otras opciones y una de las más populares es un 'roommate' o un compañero de apartamento.
El 'rommate' es esa persona “perfecta” que solo existe en nuestra imaginación y que nos pasamos la vida entera buscando. Alguien que sea aseado, que pague puntual las cuotas del arriendo, que no moleste, que no le fastidie la música alta, o si somos el personaje contrario, que no escuche música muy alto, que no meta a cualquier persona al apartamento, que no dependa de ti para todo, que respete tus cosas y si son cosas compartidas que las cuide, en fin muchos requisitos y no es fácil encontrar quien cumpla con todo eso.
Por eso la mayoría de veces terminamos aceptando a algún amigo al que le tenemos confianza, que apreciamos mucho, pero que al final la convivencia termina siendo todo un infierno y no sabemos cómo decirle que es: “Un compañero de piso de mierda”.
Precisamente en España acaban de lanzar un libro que lleva este mismo nombre. El compañero de piso de mierda es una guía de supervivencia para compartir con la persona con la quién vives y así mejorar la convivencia en casa y el portal web Yorokobu da algunos ejemplos en imágenes de por qué siempre nuestro compañero de apartamento es todo un fastidio.
1.
El libro nos enseña las Tres leyes del Compañero de Mierda:Primera ley:
Hay un compañero de mierda en cada casa compartida.Segunda ley:
El compañero de mierda lleva a hacer cosas de Compañero de Mierda.Tercera ley:
Si no tienes un compañero de mierda en casa, es que eres tú.En el libro además, el autor describe los diferentes tipos de compañeros y las cosas tan básicas que hacen que queramos echarlos a patadas a veces, pero no lo hacemos porque de cierta manera necesitamos su dinero y no queremos arruinar la amistad.
2.
Como desastres en la cocina
3.
O las mil maneras de no mantener el baño aseado, entre esas:
4.
Que demoren demasiado en sacar la basura que a la esponja le salgan plantas
5.
Ser tan trastes que ocurra algo como esto:
6.
Que usen tus cosas sin permiso o peor que se coman tu comida y de esta manera:
7.
Bueno, a veces hasta son creativos
Está claro que no existe el compañero perfecto, pero bueno, al menos podemos intentar ser pacientes y saber que nuestros amigos, por muy bien que nos la llevemos con ellos, no siempre serán la mejor opción para compartir hogar.
