¿Qué Pasa?

El seagal de la salsa quiere pegar en Barranquilla

El artista boricua se mueve entre la salsa dura y la romántica.

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Las múltiples bromas de la que era objeto por su sorprendene parecido físico con la estrella de cine y las artes marciales Steven Seagal; las aprovechó el sonero boricua Raphy Palacio para identificarse artisticamente como el Seagal de la Salsa, un nombre que ha resultado pegajoso y que lo ha acompado en su exitosa carrera musical.

“Por donde quiera que paso la gente se queda asombrada, creen que se trata del propio Steven Seagal, pero soy su doble, lo ando buscando a ver si por lo menos me incluyen en una de sus películas para reemplazarlo en las escenas de riesgo”, contó entre risas el vocalista oriundo de Puerto Nuevo, en la Isla del Encanto, durante su visita ayer a la redacción de AL DÍA.

Su historia es muy particular, debido a que desde los 13 años integró reconocidas agrupaciones merengueras como Rokabanda con Kinito Méndez, Wilfrido Vargas y Tempo Dominicano.

“Siempre he sido alto, mido 6,1 pies (1.82 metros) y eso me favoreció para poder trabajar sin que me pusieran problemas en los bares y discotecas, crecí en medio del merengue, incluso me mudé a República Dominicana, donde obtuve fama y viajé por diferentes países europeos”, explicó Palacio.

Sin embargo, en 1998 decidió alejarse de los escenarios y estudiar leyes para capitalizarse y poder cumplir sus sueños, y no lo de los directores de orquesta, como afirma.

Bajo esta premisa retomó su carrera musical hace dos años y lo hizo a ritmo de salsa, el género que siempre lo ha apasionado.

“Siempre llevé ese gusto casi que a escondidas, y me dije a mí mismo que algún día lo cumpliría y aquí estoy demostrando que nunca es tarde para cumplir los sueños”.

En 2017 reaparece con su proyecto denominado El Seagal de la Salsa, con el que lanzó su primera producción Como tú no hay dos, de la que se desprendió el tema Déjate besar, que según explicó sonó fuerte por Estados Unidos, México y Puerto Rico.

“A raíz de ese hit pude abrir varios conciertos a la Sonora Ponceña y realizar giras de medios por Estados Unidos, esto fue muy importante porque no tengo el respaldo de una casa disquera, me ha tocado con las uñas, valiéndome de la ayuda de varios amigos”, sostiene el artista.

TRAE DOS INVITADOS ESPECIALES

Ahora acaba de sacar al mercado su segunda producción Seagalízate. Para este álbum de 10 canciones trae dos invitados especiales, Luisito Carrión, con quien interpreta a dúo Cualquiera puede ser; y Johnny Rivera, con quien canta Que bonito es querer.

“Ellos son muy buenos amigos que conozco hace años y que han creído plenamente en mi talento, les hice la invitación y aceptaron con gusto, especialmente Luisito quien me dice que tengo un toque único ya que me sé mover muy bien entre la salsa gorda y la romántica”.

Al referirse de nuevo a su parecido físico con Steven Seagal contó una anécdota que le ocurrió en Las Vegas, en una calle donde varios dobles de famosos se sacan fotos con turistas y le regalan propinas. “Me comenzaron a llenar los bolsillos de dólares y a pedirme fotos, no entendía qué ocurría, pero cuando me explicaron, la carcajada fue enorme”, concluyó El Seagal de la Salsa quien anoche actuó en La Cueva y en la Oficina del Checo.

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