¿Qué Pasa?

ESPECIAL | El Gran Pijuán, sinónimo de salsa brava y potencia pura

El recién fallecido ‘Chicho Pijuán’ deja un legado muy grande por defender.

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Si dentro de la cultura picotera hay un picó que fue concebido para convertirse en el gran impulsor de la salsa brava, ese es El Gran Pijuán, máquina musical creada en el barrio La Alboraya en 1968 y que se popularizó bajo el liderazgo de Luis Antonio Eljaiek, mejor conocido como ‘Chicho Pijuán’, quien falleció el pasado 5 de enero por causas naturales.

Tras la partida de este importante miembro del circuito verbenero, AL DÍA habló con algunas personas cercanas a ‘Chicho’, quienes también hicieron sus aportes para enaltecer la leyenda del Pijuán. Uno de ellos es el pintor de picós Gerson Costa, quien fue el encargado de plasmar en los parlantes la imagen del reconocido pianista boricua José Juan Piñeros González, director del Sexteto Pijuán. “Soy pionero de la gráfica picotera aquí en Barranquilla y fui llamado por El Mono Eljaiek (padre de ‘Chicho’) para pintar su picó, pero no tenían claro el concepto. Por esos días del año 1968 el distribuidor musical Ernesto Torres ‘Ticotín’ que vivía en Nueva York, mandó unos LP con música nueva, así que me puse a revisar todas las carátulas y encontré Ahora sí del Sexteto Pijuán. En la parte principal había siete personas, así que busqué en la contraportada y estaba el maestro José Juan Piñeros González (Pijuán) solitario y sentado, de ese lado todo estaba a blanco y negro, así que pensé que ese dibujo podía quedar bonito en el picó al darle vida con colores fluorescentes”, comenzó a recordar Costa.

Siguió su relato mencionando que le mostró la imagen al Mono Eljaik y a su hijo ‘Chicho’ quienes el único reparo que tuvieron fue que Pijuán tenía un cigarrillo en la mano, pero aun así le dieron el aval. Fue tanta la acogida de su idea que Gerson no solo plasmó el colorido dibujo, sino que del LP Ahora sí, impusieron temas como La maestranza. “Cuando pinté ese picó fue una verdadera sensación en Barranquilla y eso me hizo ganar renombre al punto que me llamaron para pintar otros picós como El Rojo, El Isleño, El Sibanicú, El Palladium, todos querían que les pintará sus máquinas, pero me resultaba imposible ya que solo tengo dos manos, una para el trazo y otra para sostener la pintura”, contó entre risas Gerson, quien sigue pintando turbos pequeños de cuatro parlantes en su casa en el barrio El Santuario.

El de los exclusivos

El coleccionista e investigador cultural Laín Domínguez, contó a este medio que El Gran Pijuán impulsó mucha música, especialmente temas salseros y africanos que tuvo como exclusivos y que ningún otro picó logró tener en su discoteca con el paso de los años. Uno de esos temas es Se acabó el platanal, de Bimbi y su Trío Oriental.

“Solo hasta hace cuatro años lo logró conseguir el coleccionista Manuel Henríquez en Estados Unidos. Picó que diga que también lo tuvo está mintiendo”, afirmó Domínguez.

A nivel salsero pegó también Descarga oriental de Lou Pérez y también Cucucha Cucha de La Charanga 76 y también Ansia, de Ralphy Santi y su conjunto.

En la línea africana también hizo historia al convertir en éxito temas como El fallé fallé y El Partido. “Del primero al parecer solo hay un registro que tiene un coleccionista en Cartagena, pero la calidad del sonido es mala. A El partido, nadie sabe su nombre original, ‘Chicho’ lo bautizó así porque la pasta se partió y aun así siguió sonando con muy buena calidad, ese es otro tema que nadie ha podido conseguir. También impusieron el Ela Ela, ese sí estuvo al alcance de muchos picós”.

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