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ESPECIAL | Ronaldinho, la otra leyenda que le dice adiós al fútbol

El brasileño no solo se destacó por sus gambetas, sino también por su espíritu humanitario.

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Fue un mago del fútbol, un artista que hizo sonreír al balón y con él llegó a la cima del mundo. Has­ta que se aburrió de las alturas. Después de dos temporadas sin equipo, Ronaldinho Gaúcho se retiró a los 37 años de un juego en el que ya es una leyenda.

Lleno de trofeos y coronas individua­les, reconocido por su alegría constan­te dentro y fuera del campo de juego, así será recordado por muchos el as­tro brasileño, quien marcó una de las épocas más gloriosas en el Barcelona de España.

HUMILDAD EN TODO MOMENTO

Una de las personas que más pudo disfrutar del carácter humilde de ‘Din­ho’ fue Lionel Messi. En 2003, cuan­do el argentino tenía 17 años, llegó al camerino del Barcelona, en el que ya el brasileño era el líder natural.

José Sámano, editor general de de­portes del diario El País de España, en una reciente entrevista con AL DÍA, explicó la forma en que Ronaldinho fue el encargado de darle la bienvenida a Messi en ese entonces.

“Ronaldinho lo arropó enseguida, lo integró al grupo con su forma de ser, Messi toda la vida le estará agradecido por ese gesto”, afirmó Sámano.

“Como siempre dije, aprendí mucho a tu lado. Siempre te estaré agradecido por lo fácil que me hiciste todo cuando llegué al vestuario. Aunque decidas ir­te, el fútbol no se olvidará de tu sonrisa jamás. Todo lo mejor, Ronnie”, expresó Lionel en una carta que le escribió al brasileño el miércoles pasado.

El 29 de septiembre de 2015, con la camiseta del Fluminense, Ronaldinho disputó su último partido a nivel pro­fesional. En el transcurso de estos dos últimos años disputó algunos partidos de exhibición en India, Arabia Saudita, México, entre otros.

Según su hermano y representante, Roberto de Assis, ‘Dinho’ sí quería vol­ver a jugar profesionalmente, pero te­nía algunas condiciones que la mayo­ría de clubes que estaban interesados en él, no podían aceptar.

Por ejemplo, sus entrenamientos no iban a tener la misma intensidad que los de sus compañeros, y debía tener algu­nos ‘permisos especiales’ debido a com­promisos publicitarios en su país, donde es una de las imágenes más apetecidas de grandes marcas empresariales.

“Estoy realizado. No me falta nada. A veces siento nostalgia de jugar un clásico. No me gusta ni ver fútbol. Nun­ca me gustó verlo. Me gusta ver goles, mejores momentos... No me gusta que­darme viendo un partido”, confesó en diciembre a SporTV.

Nacido en 1980, Ronaldo de Assis Moreira debutó como profesional en el Gremio de su ciudad con apenas 17 años. Sus destellos no tardaron en atraer al París Saint-Germain, que le contrató en 2001.

Pero fue en Francia donde la leyenda nocturna de ‘Dinho’ se dio a conocer. En la mansión que tenía en París cons­truyó una lujosa discoteca, en donde compartía con algunos compañeros de equipo y amigos a los cuales les costea­ba los tiquetes desde Porto Alegre, so­lo para que estuvieran a su lado en las fastuosas celebraciones.

Según él mismo, luego de su sali­da del Barcelona en 2008 le perdió el gusto a la competencia. “Pienso que si eres feliz tienes que hacer lo que te gusta, y a veces no me quería levantar a entrenar. Igual los entrenadores me incluían en el equipo y daba mi mejor esfuerzo”, expresó Ronaldinho el año pasado en un evento benéfico en Río de Janeiro.

En 2013 regresó a su país para po­nerse la camiseta del Atlético Mineiro y fue la gran figura en la obtención del título de la Copa Libertadores de Amé­rica. Al año siguiente levantó la Reco­pa Sudamericana.

CAMPEÓN EN COREA Y JAPÓN

En 2002 hizo parte de la selección brasileña que levantó el título en el Mundial de Corea y Japón. Aunque en esa ocasión las dos grandes estre­llas fueron Rivaldo y Ronaldo, ído­los mundiales del momento.

Su gran aporte estuvo en el triunfo 2-1 ante Inglaterra en los cuartos de final, allí marcó el segundo tanto a los 50 mi­nutos de partido. Siete minutos más tarde sería expulsado por una fuerte falta sobre un rival. Sería una de las pocas veces que vio la tarjeta roja en toda su carrera.

A finales de diciembre se especu­ló con que ‘Dinho’ iba a entrar en la política de su país a través de una posible candidatura a senador como miembro de un partido de extrema derecha, pero su hermano se encar­gó de desmentirlo primero y luego él mismo a través de un comunicado en el que resumió gran parte de sus de­seos tras confirmar su retiro.

“La pe­lota es la compañera de mi vida. No he estado con nadie más tiempo que con ella. Mis gustos son diferentes, por eso me retiro, quiero estar con mi familia y disfrutar la vida, como lo he hecho siempre”.

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