Historias

ESPECIAL | Así cayó proxeneta de una temible red de prostitución infantil en B/quilla

El proxenetismo es un delito, consiste en obtener benefi cios económicos de la prostitución a costa de otra persona. Los proxenetas son uno de los principales implicados en otra conducta delictiva, la trata de personas.

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La corpulencia física de Jhoan Alberto Arrieta Idarraga, apoyada en un cuerpo trabajado en gimnasios, les abrieron las puertas de muchas discotecas de Barranquilla que lo vinculaban para que les atrajera clientes, actividad que en el medio de la rumba se conoce como ‘jalador’.

Pero al mismo tiempo Jhoan, de 40 años, se dedicaba al proxenetismo, es decir, conectaba a chicas ‘prepagos’ con sus clientes y les cobraba a ellas una comisión. El gran error del hombre fue que en su catalogo ofrecía a menores de edad, y por allí comenzó a caérsele su entramado. De acuerdo con la Fiscalía, niñas desde los 13 a los 17 años fueron prostituidas por Jhoan en discotecas de Barranquilla, sobre todo en las que están situadas en el corredor rumbero de la carrera 8, conocido como ‘la zona rosa del sur’. La investigación para capturar a Jhoan empezó en el 2014, cuando una madre angustiada llegó a la Fiscalía y denunció que su hija quinceañera se había ido de la casa, que vivía con otra niña en un apartamento y se dedicaba a la prostitución.

Randy Fontalvo y Kevin Mercado Rivas, también señalados de ser miembros de los ‘Presentadores’ | Al Día

La Fiscalía buscó a la jovencita, y en sucesivas entrevistas con ella y sus amigas fueron descubriendo la vasta red de prostitución que manejaba a menores, de la cual hacia parte Jhoan. La banda se hacía llamar los ‘Presentadores’, porque aprovechaban su trabajo como ‘jaladores’ y presentaban en discotecas a jovencitas que atraían con la promesa de tragos y cocteles gratis.

Estas son las interceptaciones telefónicas que se hicieron:

Luego les ofrecían entre 70 y 200 mil pesos a cambio de sexo con clientes. El proxeneta se quedaba con entre 20 y 50 mil pesos por hacer el contacto. La Fiscalía determinó que Johan solo era uno de los ‘presentadores’, pues hay muchas más personas involucradas a esta actividad ilícita. La banda también usaba las redes sociales, en especial Facebook, como estrategia de reclutamiento de las niñas. La investigación de las autoridades incluyó seguimientos, rastreo de redes e interceptación telefónica. Esto permitió que el pasado 1o. de diciembre Jhoan fuera capturado en una discoteca que funciona dentro de un centro comercial.

En las audiencias concentradas de legalización de captura, imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento, la Fiscal del caso relató que muchas de las ‘pelaítas’ prostituidas por Jhoan y sus amigos viajaban con sus clientes a ciudades como Montería, Santa Marta, Cartagena y San Andrés. Algunas eran obligadas a consumir droga, tener sexo lésbico o grupal, y a hacer cualquier cantidad de vejámenes. Otras resultaban golpeadas y maltratadas físicamente.

Al término de la diligencia judicial el Juez de Control de Garantías decidió asegurar a Jhoan Alberto Arrieta Idarraga en la Penitenciaría de El Bosque, en un pabellón aislado para preservarle su integridad física. También avaló la incautación de su celular, que ya está siendo analizado por la Policía Judicial pues contiene información que permitirá la captura de más miembros de la organización.

A Jhoan le imputaron cargos por los delitos de inducción a la prostitución en concurso heterogéneo con proxenetismo con menor, y utilización y facilitación de medios de comunicación para ofrecer actividades sexuales con personas menores de 18 años. El tipo no aceptó cargos, ahora enfrenta una pena de 20 a 25 años de cárcel, al igual que los otros miembros de la red que habían sido capturados previamente: Randy Johan Fontalvo Fontalvo, de 35 años, y Kevin Ismael Mercado Rivas, de 21. La investigación no termina ahí, las autoridades van por más involucrados.