Los problemas de diabetes que aquejaban a Héctor Guillermo Ochoa Guzmán, de 54 años, le jugaron una mala pasada justo cuando conducía su motocicleta sobre la calle Murillo, en sentido norte - sur, a la altura del estadio Metropolitano.
Un mareo le hizo perder el conocimiento, cayó de forma aparatosa y su cabeza golpeó fuertemente contra los separadores que hay en la vía para el tránsito de los buses articulados de Transmetro, según informó la familia a AL DÍA.
Este incidente ocurrió a las 10 de la mañana del pasado 26 de mayo, cuando Héctor se dirigía hacia su vivienda situada en la calle 59A No. 16A - 57, barrio Villa Las Moras, de Soledad.
“Las personas que se encontraban en el sector al momento del hecho eran unos desalmados y oportunistas. En vez de auxiliar a mi marido lo que hicieron fue robarle 1 millón 800 mil pesos que había retirado de la pensión, los cascos, el celular y otras pertenencias. Lo único que no se llevaron fue la moto y una bolsa que contenía arroz y aceite que él había ido a comprar”, dijo su pareja sentimental Gladys García Padilla.
Después de que le saquearon los bolsillos al hombre inconsciente y malherido, una ambulancia llegó hasta el lugar y lo trasladó al Hospital General de Barranquilla. Como requería servicios más especializados lo remitieron ese mismo día en horas de la noche a la clínica de alta complejidad Vidacoop.
En la Unidad de Cuidados Intensivos de ese centro asistencial estuvo en estado crítico durante 19 días, hasta el pasado martes que falleció a las 7:30 de la mañana.
Héctor Ochoa Guzmán prestó servicio durante 24 años como agente de Policía. Desde hace 10 años disfrutaba de su pensión.
Era natural de Montería y residía en la dirección antes mencionada del barrio Villa Las Moras, junto a su esposa Gladys García Padilla y sus cinco hijos.