¿Qué Pasa?

Por fuertes vientos siguen restricciones para los pescadores

Un pescador que estaba perdido lo sacó el viento a la playa.

Compartir en:
Por:

Árboles y redes caídas son hasta el momento las consecuencias de la fuerte brisa que está azotando la península de La Guajira, desde hace 48 horas y que ha hecho que las autoridades tomen medidas preventivas para evitar tragedias.

El capitán de Puerto en Riohacha, teniente de Corbeta Andrés Murillo, indicó a AL DÍA que las condiciones meteomarinas no han mejorado y las restricciones en la navegación no se han levantado.

Siguen recomendaciones

El oficial expresó que la prohibición para que las playas sean usadas por los bañistas sigue vigente y continúa la recomendación a los pescadores para que mientras se mantengan los fuertes vientos eviten al máximo hacerse a mar en faenas de pesca.

En la actualidad el viento genera olas que van desde dos metros en las costas hasta 4,6 metros en alta mar, lo cual es muy peligroso para las embarcaciones de los pescadores que son muy frágiles y no cuentan con los medios necesarios para hacer frente al embate demoledor de las olas de esa altura.

Apareció el pescador perdido

El Capitán de Puerto indicó que el día sábado recibió información del gremio de pescadores en el sentido de que uno de ellos había zarpado a la jornada de pesca desde la población de Mayapo y no se había producido su regreso en las horas de la tarde, lo cual fue muy preocupante.

En la mañana de ayer domingo al mismo funcionario le hicieron una llamada para informarle que el pescador, cuya identidad no fue establecida, fue hallado con vida y con su embarcación, un poco más abajo del corregimiento Camarones.

Lo que se presume es que la fuerte brisa que sopla en mar adentro, lo empujó hasta esta localidad o quizás había sufrido alguna avería el motor de la embarcación.

El hombre fue encontrado por sus compañeros de oficio y llevado hasta el pueblo para que se hidratara.

Ráfagas de tierra en la cara

Una mujer que habita en inmediaciones del Cabo de la Vela dijo a esta redacción que allá el viento se siente con mayor intensidad y deben hacer proezas para mantenerse fuera de los ranchos. Dice la mujer que para comer se tienen que encerrar y tapar las hendijas porque la brisa les lleva arena al plato y no los deja comer tranquilos.

Aquí se habló de