¿Qué Pasa?

Seis sicarios en moto asesinaron a José Francisco, miembro del CTI

Era Coordinador de Actos Urgentes de la URI. Anoche se conoció la captura de dos sospechosos.

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En pleno Día sin Moto, medida adoptada por la Alcaldía de Soledad para garantizar la seguridad cada fin de mes, seis sujetos en tres motocicletas no encontraron obstáculo alguno para asesinar a mansalva a un investigador del CTI de la Fiscalía que se movilizaba en su carro por la calle 18.

A los pistoleros tampoco les importó cometer el crimen en una hora ‘pico’ en la que esa importante vía es bastante transitada.

Así estaban siguiendo los sicarios a la víctima

José Francisco Muñoz Gómez, abogado, Técnico Investigador I de la Fiscalía General de la Nación, fue interceptado ayer por los seis sicarios en la 18 con carrera 37B, barrio Las Margaritas, frente al conjunto multifamiliar Los Mangos, a las 11:50 a.m.

Los matones —cuentan testigos— abrieron fuego contra Muñoz Gómez cuando este iba manejando su vehículo, un Chevrolet Optra gris, de placas PFJ979 de Pereira.

Muñoz Gómez, de 50 años, quedó agonizante con su pistola de dotación en el pecho y el cuerpo inclinado hacia el puesto del copiloto, donde reposaban unos papeles con el logotipo de la Fiscalía y su teléfono celular. Vestía una camiseta azul cielo, un bluyín y zapatos tenis.

Los pistoleros huyeron por la misma calle 18 y doblaron por la carrera 37, entrada principal del barrio Salamanca. Vecinos aseguran que una de las motos era una Suzuki AX4 negra, cuyo parrillero vestía camiseta del mismo color.

Luego del atentado hubo confusión. Mientras muchos corrían hacia el carro del investigador del CTI, otros intentaban tranquilizar al conductor de un bus de la empresa Transdíaz, que salía de Soledad hacia Barranquilla y tuvo que frenar intempestivamente cuando Muñoz Gómez hizo la ‘U’.

“¡Mataron al man, mataron al man, casi me dan a mí!”, decía entre sollozos y agachado a un lado de la vía el chofer.

Los curiosos encontraron a Muñoz Gómez con señales de vida, pero no se atrevieron a sacarlo del vehículo por temor a que la pistola —que quedó colgada de la cadena de placa del investigador— se disparara.

Diez minutos después arribó una patrulla de la Policía. Un uniformado llegó hasta el carro y reconoció a la víctima: “¡José, José!”, le gritó. Guardó el arma del investigador y con ayuda de su compañero lo llevó a la Clínica Porvenir, donde al poco tiempo declararon su muerte. “El paciente no respondió a las labores de reanimación”, indicó una fuente médica.

El vehículo quedó estacionado, con múltiples orificios de bala, de afuera hacia adentro y de adentro hacia afuera. Investigadores indicaron a AL DÍA que Muñoz Gómez hizo al menos 10 disparos para defenderse del ataque, incluso uno de los asesinos cayó al piso. “Encontramos solo 5 cartuchos en la pistola de José, estamos haciendo un barrido en centros médicos para saber si alguno de los sicarios quedó herido”, dijeron.

Al cierre de esta edición, AL DÍA supo por una fuente de entero crédito que dos sospechosos fueron capturados. “Encontramos a uno de los bandidos heridos en una clínica y este dio la ubicación de quien, al parecer, disparó contra Muñoz”, dijo el informante.

Este medio también conoció que para el atentado usaron pistolas calibre 45, proyectil de gran poder. Los casquillos quedaron alrededor del vehículo y dentro del mismo había algunas ojivas".

Al menos seis balazos hicieron blanco en la espalda de la víctima. Al lado del carro quedaron las tres hojas de un oficio con el logo de la Fiscalía, todas ensangrentadas. En el sitio hizo presencia un numeroso grupo de miembros de la Fiscalía, que lamentaron lo ocurrido y consolaron a un hijo del occiso.

Compañeros de Muñoz Gómez indicaron que este había salido de la URI Barranquilla tras una reunión de trabajo y se dirigía a la sede del organismo en Soledad (que queda a cinco cuadras del lugar del crimen), pues tenía un almuerzo programado con ellos. Otra fuente asegura que iba a atender un procedimiento de captura.

Detectives creen que lo venían siguiendo desde el Centro de Barranquilla. Otra versión indica que las tres motocicletas le salieron al paso por la carrera 41, del barrio Costa Hermosa, a una cuadra del CAI de ese vecindario.

“Si hubiesen pasado frente al CAI los detienen, porque es Día sin Moto en Soledad”, dijo una fuente.

Una de las hipótesis que manejan las autoridades policiales sobre este asesinato es que estaría relacionado a una investigación por homicidio que adelantaba Muñoz Gómez y que pese a ser reubicado en otra dependencia seguía ligado a la misma.

¿QUIÉN ERA LA VÍCTIMA?

José Francisco Muñoz Gómez nació el 19 de noviembre de 1965 en Soplaviento (Bolívar). Vivía en el barrio Las Nievesera abogado y llevaba siete años trabajando en el CTI. Ingresó al organismo el 2 de febrero de 2009, como secretario III del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), adscrito a la Unidad Local del municipio de Soledad.

En marzo del 2012 fue ascendido al cargo de Asistente Investigativo criminalístico IV. Ese mismo año realizó el curso básico de Policía Judicial. En el año 2014 fue ascendido al cargo de Técnico Investigador I y se desempeñaba como investigador de la Unidad Local de Policia Judicial del CTI de Soledad. Hace apenas una semana se había posesionado como Coordinador encargado del Grupo de Actos Urgentes CTI de la Unidad de Reacción Inmediata (URI), captura en Flagrancia, en Barranquilla.

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