Uno de los homenajes a Lisandro Meza
Uno de los homenajes a Lisandro Mezacortesía
¿Qué Pasa?

Rinden homenaje a Lisandro Meza con altares en Palmitos, su pueblo natal

En el altar, destaca una fotografía en gran formato que captura un momento significativo en la vida de Lisandro Meza: su graduación como bachiller honoris causa de la Concentración de Desarrollo Rural Los Palmitos.

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  • En el barrio El Progreso, la comunidad homenajea a Lisandro Meza con altares que reflejan afecto y respeto.
  • Nelly Cristina Martínez, pariente de su esposa, erige un altar con una fotografía que captura un momento significativo en su vida.
  • El altar simboliza la admiración por Meza como vecino ejemplar y embajador musical de Sucre. 

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En el tranquilo barrio El Progreso, hogar del maestro Lisandro Meza, la comunidad rinde homenaje al ícono de la música vallenata de una manera conmovedora y respetuosa. Más allá de la presencia de música y banderas de Colombia que llenan el aire en su honor, varios altares se erigen como testimonio del afecto y respeto que sus vecinos le profesan.

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Nelly Cristina Martínez, pariente de Luz Domínguez, esposa de Lisandro Meza, decidió expresar su admiración y afecto al maestro creando un altar en su memoria. Según Martínez, la iniciativa surgió de un sentimiento genuino, motivado por la percepción de Meza como un excelente vecino y un distinguido embajador de Sucre y Colombia en el ámbito mundial gracias a su contribución a la música vallenata.

En el altar, destaca una fotografía en gran formato que captura un momento significativo en la vida de Lisandro Meza: su graduación como bachiller honoris causa de la Concentración de Desarrollo Rural Los Palmitos, Sucre, el 22 de diciembre de 1999. Esta imagen simboliza no solo sus logros académicos sino también su arraigo a la comunidad y su compromiso con el desarrollo de la región.

El gesto de Nelly Cristina Martínez refleja el profundo impacto que Lisandro Meza tuvo en la vida de quienes compartieron su entorno. El altar se convierte en un testimonio tangible de la admiración y cariño que la comunidad guarda por el maestro, cuya música resonará eternamente en el corazón de El Progreso.

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