¿Qué Pasa?

El misterio detrás de la muerte de Ludonel, el vigilante que encontraron dentro de un motel

El hecho ocurrió en el barrio Las Palmeras, en Cartagena.

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Incertidumbre es lo que rodea la muerte de un hombre de 38 años, quien decidió quitarse la vida al dispararse con un revólver, al interior de un motel al suroccidente de la ciudad en horas de la tarde del pasado domingo.

Mairo Morelos, hermano de la víctima identificada como Ludonel Causil Martínez, no sabe las razones del por qué decidió quitarse la vida de esa manera, pues nunca le dijo cómo se sentía ni qué tenía.

El hecho se registró a las 2:30 de la tarde del domingo en el aparta hotel Villa Campestre, cuando Ludonel recién había tomado turno como vigilante. El hoy occiso, llegó al lugar, y luego de ingresar a la habitación 13, tomó su arma de dotación y se propinó un disparo en la cabeza, herida que le causó la muerte de manera instantánea.

Las personas que se encontraban en el motel, se asombraron al escuchar el sonido del disparo, por lo que de inmediato, llegaron hasta la habitación y se encontraron con la escena: el cuerpo tendido en el suelo en medio de un charco de sangre.

De inmediato dieron aviso a las autoridades, quienes llegaron al lugar de los hechos para realizar el respectivo levantamiento del cadáver y posterior traslado a la morgue de Medicina Legal.

Igualmente, las autoridades iniciaron las indagaciones respectivas para conocer qué fue lo que sucedió y estas lograron establecer de manera preliminar, con base a un interrogatorio a la excompañera sentimental y a una empleada del sitio, que Ludonel se suicidó, al parecer, por un problema sentimental.

Sin embargo, al preguntársele a su hermano, por esta situación en particular, le dijo a AL DÍA que, “no sé si era por esa situación porque nunca nos decía nada, es más nunca lo vimos triste”, expresó.

Los familiares manifestaron que se enteraron del trágico hecho, debido a que cuando el reloj marcó a las 5:30 de la tarde, recibieron una llamada de un primo de la víctima con quien vivía arrendado en el barrio Nuevo Paraíso y les entregó la mala nueva.

A pesar de lo expresado por la Policía que tiene como hipótesis que todo obedeció por problemas sentimentales, el hermano de la víctima expresó que Ludonel era una persona muy alegre y que no cree que el hecho sea por problemas sentimentales, pues él se había dejado hace años con la compañera sentimental, con la que deja tres hijos.

Ludonel tenía ocho años de residir en Cartagena y cinco trabajando con la empresa de vigilancia.

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