¿Qué Pasa?

La ‘terquedad’ convirtió a Luis Carlos en el primer asesinado del 2020

El hombre tenía tres días de haber regresado a Barranquilla de donde se fue huyendo a raíz de un atentado sicarial.

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"¡Mijo, no te pongas chancletas, ponte zapatos por si te toca salir corriendo!". Fue el último consejo que Fanny Pérez le dió a su hijo Luis Carlos Grazziani quien, pese a las advertencias de su familia, había decidió regresar de dónde se había exiliado por dos meses a raíz de un ataque sicarial del que había sido víctima en noviembre de 2019.

En esa ocasión a Luis Carlos lo persiguieron varias cuadras y cuando se lanzó a un arroyo para continuar el camino cuatro balas se alojaron en rostro y cuerpo, pero milagrosamente, ninguno perforó órganos vitales y luego de 20 días hospitalizado, su madre le dijo que se fuera porque de seguro "volverían por él".

"Cuando lo ví en la casa de nuevo le dije que por qué había regresado, que él sabía que estaba caliente, pero él lo que me dijo fue que si él no había matado a nadie por qué tenía que esconderse como un bandido, que los que tenían que tener miedo eran los que le habían hecho el atentado", contó Fanny.

Los hechos

Fanny, su hijo Luis Carlos y varios de los nietos de la mujer estaba sentados en la terraza de su vivienda ubicada en la calle 43 con 9B, barrio Manuela Beltrán, en Soledad.

Con la precisión de quién ha sobrevivido a la muerte, Luis Carlos ordenó a los niños entrar a la casa y les cerró la reja, así que solo eran él y su madre quienes quedaron afuera, cuando a lo lejos ve dos hombres que corren a toda prisa por la calle destapada con dirección hacia él.

No lo pensó dos veces y salió corriendo mientras que uno de los sicarios le disparó pero ninguno hizo blanco. Sin embargo, Luis Carlos no contaba que en la cuadra de arriba, había dos pistoleros más que aguardaban a los otros dos en moto y quiénes también estaban armados.

Cuando Luis Carlos ingresó a la tienda para coger por otra calle para escaparse pero como estaba en chancletas, se resbaló, cayó los otros dos sicarios le propinaron dos balazos que le impactaron en el pecho y abdomen, y en el traslado hacia la clínica Adelita de Char murió.

"Mi hijo era muy terco, se lo dije, se lo repetí, no vuelvas, pero no me hizo caso", lamentó Fanny.

¿Lucha territorial?

Luis Carlos Grazziani tenía 33 años y era padre de tres niñas por las que trabajaba vendiendo cd's en las calles, no obstante, tal como lo reconoce su madre, "estaba emperrado en el vicio".

"Él tenía su problema con la marihuana, no lo niego, pero él no vendía, si no que cargaba con cuatro o cinco tabacos para su consumo personal, pero si llegaba algún amigo él le vendía uno de los suyos, pero no era jíbaro. No sé si será que creían que él estaba metiéndose en la plaza de pelaos que sí venden marihuana por aquí", dijo Fanny Pérez.

La mujer asegura que su hijo Luis Carlos no tenía ningún antecedente penal, tampoco había recibido amenazas, ni tenía problemas de ningún tipo, pero sí está segura que quienes atentaron contra él en noviembre pasado, ahora sí terminaron la tarea.

"Él pensaba que era uno no quería que estuviera en la casa, que no lo queríamos aquí, pero sus hermanos y yo se lo decíamos era por su bien".

Las autoridades indagan en los vídeos de las cámaras de seguridad de la tienda donde ocurrió el crimen para establecer las identidades de los sicarios que acabaron con la racha de cero homicidios que tenía Barranquilla y su área Metropolitana desde el pasado 30 de diciembre.

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